Un fenómeno político-religioso está tomando fuerza en Antioquia: el creciente apoyo de iglesias y comunidades cristianas a la candidatura senatorial de Santiago Montoya, quien ha logrado conectar su visión de familia tradicional con las aspiraciones de estos grupos.
En las últimas semanas, más de 40 congregaciones han manifestado públicamente su respaldo al proyecto político de Montoya. “Vemos en él a alguien que defiende nuestros valores sin complejos”, afirma el pastor Roberto Gómez, líder de la Iglesia Cristiana Renacer, con presencia en 15 municipios antioqueños.
El movimiento trasciende denominaciones. Católicos, evangélicos, pentecostales y otras comunidades cristianas encuentran en Montoya un vocero de sus principios fundamentales: defensa de la familia nuclear, educación con valores y políticas públicas que respeten las tradiciones.
“No es solo apoyo electoral, es un despertar de conciencia”, explica María Rodríguez, coordinadora del Movimiento Familias por Colombia. “Por años hemos visto cómo se marginalizan nuestras creencias en el debate público. Santiago representa un cambio”.
El respaldo crece exponencialmente. Lo que comenzó con pequeños grupos de oración se ha transformado en un movimiento organizado que suma nuevos adherentes diariamente. Las redes sociales reflejan este fenómeno con testimonios de familias que encuentran en Montoya una voz para sus convicciones.
“Mi compromiso es con todos los colombianos, pero no ocultaré que mis valores cristianos guían mi acción política”, declaró Montoya en reciente encuentro con pastores en Medellín.
El fenómeno se expande por municipios del Valle de Aburrá, Oriente y Urabá. Cada semana, nuevas iglesias se suman, organizando comités de apoyo y jornadas de oración por Colombia. El mensaje resuena especialmente entre jóvenes cristianos que buscan referentes políticos coherentes con su fe.
La adhesión continúa multiplicándose, evidenciando que cada día más personas se identifican con un proyecto político que no renuncia a sus principios espirituales.

